Después de un año 2022 muy bueno para el mercado de financiamiento PYME, el 2023 inició con la misma tendencia.
En el mes de enero, el volumen de instrumentos de financiamiento para pequeñas y medianas empresas siguió creciendo, alcanzando un total de $130.607 millones, es decir, un16% más que el mes de diciembre de 2022.
Con estos montos, el volumen presenta un crecimiento interanual del 339%.
Dentro de los productos más negociados dentro del Mercado Argentino de Valores, el pagaré bursátil sigue consolidándose como el de mayor volumen, alcanzando un 62% de total, seguido por los cheques de pago diferido con el 37% del total.
En lo que respecta a los Pagarés MAV, se negociaron instrumentos nominados en dólares y en pesos por un tota le $80.552.267.826, representando un alza del 33% respecto del mes anterior.
Dicho monto negociado refleja un crecimiento interanual del 1512%.
Las causas detrás del boom
Los pagarés bursátiles ganaron protagonismo en los últimos meses debido al interés de las empresas en emitir ese instrumento, así como también en el interés del mercado en demandar el mismo.
El pagaré bursátil fue siempre un instrumento que desde su nacimiento fue pensado para las PYMES.
Sin embargo, en los últimos meses, grandes empresas que suelen emitir obligaciones negociables, encontraron una via de financiamiento más rápida a través de los pagaré dólar linked, obteniendo financiando mucho más rápido y ágil.
Por otro lado, también desde el lado de la demanda hay grandes inversores en el mercado que quieren diversificar riesgo del soberano (sobre todo en año electoral) y obtener cobertura cambiaria ante una eventual devaluación, e invierten en pagarés.
De esta manera, están cubiertos ante un salto discreto del tipo de cambio, invirtiendo en riesgo corporativo de buena calificación crediticia y con buen management.
Es decir, las grandes empresas interactúan más que antes siendo vendedores y compradores de pagarés dólar linked al mismo tiempo, algo que no venia pasando eso hasta ahora.
En general, en promedio de los pagarés dólar linked se negociaron con plazos de entre 12 a 24 meses, es decir, de uno a dos años.
Justamente, debido a que las empresas que suelen emitir obligaciones negociables ahora deciden emitir pagares, los plazos de emisión de las ONs solía estar en plazos de entre 12 a 24 meses, por lo que tiene sentido que los pagarés sean emitidos en esos mismos plazos.
También, del lado de la demanda, los inversores que invierten en este tipo de instrumentos también están en la búsqueda cobertura cambiaria a esos plazos.
El pagaré es un instrumento a descuento, mientras que la ON tiene condiciones de emisión con ciertas características y un cronograma de pagos.
La simplicidad en la operatoria es lo que hace que el pagaré sea más fácil de emitir para las grandes empresas.
Por lo tanto, debido al contexto financiero y político argentinos, así como también gracias a la simplicidad en la confección y en la negociación, con menores condiciones que una Obligación Negociable, los pagarés bursátiles están acaparando cada vez más share dentro del mercado de financiamiento PYME.